Pide ITESM sanciones severas a empresas que contaminan el Atoyac

El Ingeniero Civil del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), Alejandro Pérez Villaseñor, planteó que desde el gobierno federal se deben implementar políticas públicas para que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) realice sanciones más severas para las empresas que desechan tóxicos en el Río Atoyac.

En entrevista el académico avaló el punto de acuerdo que presentaron este jueves los diputados federales del PVEM en el Congreso de la Unión para preservar los recursos naturales del Río Atoyac, en el que se exhorta a la Profepa y a la Conagua a vigilar el cumplimiento de la normatividad y sancionar a las empresas que contaminan el afluente.

Pérez Villaseñor, consideró que desde el Congreso de la Unión se tiene que hacer una ley para la protección del Río Atoyac con el objetivo de castigar severamente a las empresas, además en donde los intereses de la Nación estén por encima del interés económico, además dijo la petición al gobierno es que se comporte de manera enérgica realizando los cierres totales siempre y cuando también se les dé la oportunidad a las empresas para que se regularicen.

Además, de evidenciar los nombres de las empresas para ver si realmente tienen un compromiso con el medio ambiente, y así la ciudadanía decida si continua consumiendo sus productos.
Consideró que ya es hora de que el gobierno federal y estatal se “pongan las pilas” para cancelar por completo las descargas industriales, a pesar de que ya está decretado las empresas de manera clandestina continúan realizando estas prácticas.

“Creo que ya es hora de que el gobierno federal y estatal se pongan las pilas y ojalá se cancelen las descargas industriales en la zona”, aseveró.

En este sentido aplaudió que la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa), haya clausurado recientemente a 30 empresas de Puebla y Tlaxcala por contaminar uno de los ríos más importantes del país.

Es importante recordar que el Río Atoyac está siendo contaminado por la actividad humana de 38 municipios de Tlaxcala y 22 del estado de Puebla, en el que se descargan aguas residuales al aire libre y por al menos mil industrias que no cuentan con plantas de tratamiento o no funcionan adecuadamente, lo cual ha ocasionado que este afluente tenga al menos 25 sustancias nocivas y sea un foco de infección capaz de causar enfermedades como hepatitis, cólera y cáncer.

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