Fernando Castillo
Con 28 votos a favor y sólo nueve en contra fue aprobada la iniciativa de reforma a la Ley de Agua presentada por el ejecutivo del Estado Rafael Moreno Valle, durante la Sesión Pública Extraordinaria que este jueves celebró el Congreso de Puebla.
Tras la lectura del dictamen los legisladores priistas; Lauro Sánchez y Gerardo Mejía Ramírez hicieron uso de la palabra en tribuna para refrendar su rechazo a la aprobación enviada por el ejecutivo del Estado con el argumento de que los legisladores se perderá el control, abasto y cobro del servicio de agua potable.
En tribuna los legisladores Gerardo Mejía del PRI y Héctor Alonso Granados de Nueva Alianza, generaron una controversia pues en su intervención el diputado del PRI lamentó que los legisladores aprobarán esta reforma a la ley pues dijo: “Los diputados estamos siendo borrados del mapa”. Ante la polémica el diputado aliancista al pronunciarse a favor de dicha ley le recordó a Gerardo Mejía que cuando él fue regidor del ayuntamiento en la administración marinista y blanquista no hizo nada que beneficiará al sistema de Agua Potable.
Cabe mencionar que sus homólogos de la bancada del PRI Felipe López Campos y Juan Manuel Jiménez García, no coincidieron con la postura que fijaron sus compañeros, pues votaron a favor de la iniciativa enviada por el gobernador de Puebla.
En este sentido la aprobación de la iniciativa de reforma a la Ley de Agua, resta facultades a los diputados locales para regular las tarifas de cobro por dicho servicio. Además, permite la participación de privados a través de concesiones, con lo que se pretende mejorar el servicio que se lleva a los usuarios.
Es importante resaltar que la reforma tuvo el respaldo de las bancadas de Acción Nacional (PAN), Nueva Alianza, PRD, Verde Ecologista, Movimiento Ciudadano y Partido del Trabajo; además de los dos priistas antes referidos.