Por Fernando Castillo
Fundamental que desde la familia, el estado y en las escuelas se fortalezcan políticas públicas en las que se impulsen los valores a fin de revertir el ‘deshonroso’ primer lugar que tiene Puebla respecto a la discriminación en la sociedad poblana de acuerdo a la Encuesta Nacional sobre Discriminación (ENADIS) del INEGI, ya que los único que causan es “empobrecer y denigrar a la sociedad poblana”, consideró Ricardo Fernández Fuentes, especialista en Derecho Constitucional y Amparo de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP).
El académico de la institución privada lamentó que en Puebla el 28.5 por ciento de la población se haya sentido discriminada sobre la apariencia, las creencias religiosas, sexo, edad, clase social, capacidades diferentes u orientación sexual y que la sociedad continúe fomentando prejuicios y deje a un lado los códigos de ética para evitar éstas prácticas que más allá de ayudar solo deterioran el tejido social.
“Puebla resultó como una de las cuatro ciudades en donde se sufre mayor discriminación, hay que reconocer que el Estado ha sido muy flojo en establecer políticas públicas donde se fortalezca el respeto y la equidad entre personas, entre razones de género, religión y capacidades diferentes, pero tal vez tenemos que quitarle responsabilidad al Estado ya que en donde existe mayor responsabilidad es en el ceno de la familia pues en casa en donde se fomentan los valores de respeto por la persona”, sostuvo.
En entrevista para Oro Noticias, refirió que el gobierno del Estado tiene una responsabilidad muy grande y ser enérgico para cambiar esta forma de pensar y exigir que desde la sociedad, sector laboral y educativo se cumpla la Ley ya que en la Carta Magna existen tópicos para proteger a todas aquellas personas que tienen condiciones distintas a otras personas y los ponen en cierta desventaja por cuestiones físicas a fin de que haya condiciones de igualdad y equidad.
“El Estado tiene que prevalecer ese derecho, la constitución política del Estado y Federal, establece que el Estado tendrá a su cargo proporcionar herramientas para que esos grupos vulnerables, esos grupos en desventaja puedan tener condiciones de igualdad y equidad”, puntualizó.
Personas vulneradas podrán recurrir a juez
El especialista en Derecho Constitucional y Amparo de la UPAEP, recordó que toda persona que se sienta vulnerada en sus derechos y en su esfera jurídica podrá recurrir a esas leyes para que un juez los pueda escuchar y pueda sancionar a aquellas empresas, gobiernos o aquellas personas que por razones de alguna práctica de discriminación y faltos de equidad atenten contra los derechos humanos de manera particular.
“Definitivamente a Constitución Federal establece claro la no discriminación y entonces derivado de esa normativa y suprema para el Estado Mexicano existen leyes secundarias para la no discriminación a mujeres, a personas con capacidades diferentes y en general para evitar el racismo u la discriminación”, abundó.
Discriminado 28.4 % de poblanos
Puebla es la entidad donde se registra la mayor discriminación, con un 28.4 por ciento de la población que reportó haber sido víctima de este comportamiento, de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Discriminación (ENADIS) dada a conocer por el INEGI.
El 27.4 por ciento de las mujeres de 18 años declaró haber sido discriminada por algún motivo o condición personal en el último año. En tanto que el porcentaje de hombres discriminados fue de 29.6 por ciento.En ambos casos está entidad se encuentra a la cabeza de los estados la República Mexicana.
Dicho estudio desmoscópico, arrojó que la encuesta recoge actitudes, opiniones y prejuicios de la población de 18 años y más hacia distintos grupos de la población que son discriminados por motivos étnicos, de discapacidad, creencias religiosas, edad, sexo, tono de piel y orientación sexual.
El estudio del INEGI, detectó que hay algunos prejuicios, como el que la mayoría de los jóvenes son irresponsables.
De igual forma a nivel nacional poco más del 60 por ciento de la población de 18 años y más está de acuerdo con dicha afirmación; mientras que el 62.5 por ciento de los poblanos piensa que esto es cierto.