Jorge Marcelino Alejo/ Agenda Empresarial
De las grandes lecciones que dejan los procesos electorales, es que los jaloneos por puestos de elección, donde se desbordan pasiones que desatan atentados y hasta asesinatos, se dan durante la selección de candidatos. Ello ocurre –las más de las veces- al interior de los partidos.
Pero eso es algo que deberán arreglar los partidos y los políticos.
Por ahora tenemos como saldo, al final del proceso 2021, que no hay montones de alegatos ante autoridades electorales. Eso ya es ganancia, una práctica así, solo carcome más recursos económicos.
Pero como viene un reacomodo de fuerzas políticas y económicas, es preciso que ambas no eludan las premuras que se tenían en materia económica, antes de la pandemia y antes del proceso electoral.
Ya se advirtió que la economía se complicó por más de un año, por efectos del Covid 19 y sus secuelas se tendrán que superar.
Tampoco se ignora que varias ramas productivas tienen desequilibrios financieros, otros tronaron y otros más cambiaron de giro. En su mayoría se quedaron en espera de financiamiento, de incentivos fiscales, de facilidades burocráticas o de alguna otra medida que les permitiera al menos, salir de la sobrevivencia.
Y es exactamente en esta coyuntura, donde se tendrán que implementar estrategias económicas que inspiren confianza a la inversión, para que quienes toman decisiones en la planta productiva, vuelvan a mover capitales que propicien el resurgimiento de negocios y empresas que traigan ocupación y empleo.
Es pertinente apuntar, que cuando se atiendan los daños ocasionados por la pandemia, como el desplome de ventas y la merma en la producción de bienes y servicios, se tome en consideración el rezago que sufrieron las empresas, al ser descuidadas durante el proceso electoral.
Ese rezago en su atención afectó más a la economía, pues sin nada que lo detenga, el efecto inflacionario se vino con el alza de precios en productos primarios –tortilla, carne, pollo, abarrotes; medicinas – y en servicios, que redujo más capacidad financiera en empresas y poder adquisitivo en la población.
Por tanto, en los nuevos Gobiernos recae no solo el compromiso moral de cumplir sus promesas, sino en plantear estrategias que infundan el trabajo fructífero que da la confianza en la inversión, sobre todo, cuando no corre riesgos si se tiene la paz social adecuada.
M E M O R A N D U M
SIN RECURSOS
No sorprende que el Partido Movimiento Ciudadano –MC- ganara gubernatura de Nuevo León y alcaldías en ciudades como Monterrey y Guadalajara.
En la entidad poblana, José Luis Cesatti como candidato de MC a Diputado Federal por el Distrito VII de Tepeaca, alcanzó 10,519 votos y colocó a MC en el tercer lugar en ese distrito que ganó Raymundo Atanasio por MORENA con 83,169 votos. Jesús Morales del PRI llegó en segundo con 52,302.
El mérito de Cesatti, es que captó ese tanto de votos con solo gastar suela y ponerle mucha enjundia a su campaña, dado que no tuvo recursos económicos para pintar bardas y menos imprimir lonas o volantes.
Si a todo esto agregamos que por no alcanzar el 3 % de votos, desaparecerían 5 partidos de la chiquillería, mientras que MC rebasó el 7 %, pudiera no convertirse en la tercera fuerza política del país como lo propala, sino en la segunda. Y más cuando van a la baja los votos para partidos acostumbrados.
Para ello, les tendría que entrar la razón a los órganos electorales y se decidan por el bipartidismo, en lugar de tantos chiquillos (11) que despilfarran recursos del erario público.
AGUA
Esa versión de que el socavón que apareció en Santa María Zacatepec –del municipio de Juan Crisóstomo Bonilla- se originó por sobreexplotación del agua en la zona, por el negocio de empresas, tiene que ser aclarada por una institución autorizada.
Y cuánto antes, mejor.
Foto: Unir
