Milenio
Ciudad de México: Andrés Manuel López Obrador comenzó ayer el envío de cartas a los presidentes de las compañías petroleras internacionales, en la que los exhorta a medir las consecuencias de establecer relaciones de negocios con el gobierno mexicano, ya que este “pretende transgredir los principios básicos y el espíritu de nuestra ley fundacional”.
La primera misiva que será enviada al presidente de EXXON, H. Rex W. Tillerson, señala que la propuesta de reforma pretende modificar el artículo 28 constitucional y “no cuenta con la legitimidad ni el consenso de los mexicanos”.
Por ello señala, firmar contratos de utilidad compartida o invertir en refinación, la petroquímica, el gas y la industria eléctrica “sería como comprar mercancía sin factura, algo chueco, propio de la piratería”.
Indica además al presidente de EXXON que MORENA “no se opone a sus negocios ni a las inversiones privadas, siempre y cuando se respete el derecho soberano del pueblo y de la nación. Como usted comprenderá, no vamos a quedarnos cruzados de brazos ni a permitir que se nos regrese al pasado para cancelar el futuro de nuestros hijos y nuestros nietos”.
Señala también que la mayoría de la población “vería a su empresa como cómplice de un atentado contra el interés nacional”.
En conferencia de prensa, López Obrador informó que esta carta se entregará además a una decena de empresas petroleras internacionales.
Al hablar de la violencia registrada en Michoacán, señaló que la aparición de policías comunitarias o ciudadanos en defensa de pobladores, han venido surgiendo porque no existe la acción del estado, “hay un vacío, el estado incumple con su responsabilidad social, no atiende a la gente, no hay desarrollo, hay des composición y de ahí que surjan intermediarios. No es estado fallido es estado mafioso”.