Milenio
Tokio • El ministro de Defensa de Japón, Itsunori Onodera, negó que Tokio haya llevado a cabo acción alguna destinada a interferir en los ejercicios militares chinos en el Pacífico occidental, luego que Pekín había calificado las maniobras de grave “provocación”.
El Ministerio chino de Defensa denunció una “provocación peligrosa” de parte de Tokio en los pasados ejercicios militares que realizó en aguas del Pacífico, al señalar que Japón había interrumpido los ejercicios con fuego real.
La portavoz del Ministerio de Defensa, Yang Yujun, apuntó que las patrullas militares japonesas apoyadas con aeronaves estaban recolectando información sobre los ejercicios.
Onodera rechazó por su parte que Tokio hubiera intervenido en los mencionados ejercicios, que se celebraron en el sureste de Sakishima, al sur de un grupo de islas en disputa conocidas como Senkaku en Japón y Diaoyu en China.
“Realizamos las observaciones de seguridad normales, de conformidad con el derecho internacional”, aseguró Onodera, al considerar los puntos de vista de China como “inaceptables”, reportó el canal de noticias NHK.
El funcionario también destacó la importancia de establecer una línea directa entre Japón y China “para evitar la sospecha y la desconfianza entre ambas naciones.
Las relaciones entre China y Japón han sido tensas desde hace meses, luego que ambas potencias asiáticas están involucradas en una disputa sobre las islas deshabitadas en el Mar Oriental de China.
El gobierno de Pekín sostiene que las islas son una parte inherente de su territorio y el Estado tiene la soberanía indiscutible sobre ellas, mientras Japón reclama derechos históricos sobre los islotes.