Por Fernando Castillo
El gobernador Miguel Barbosa Huerta, aseguró que desde el Gobierno del Estado garantizarán las condiciones de seguridad y los protocolos de sana distancia para el desarrollo de la Procesión del Viernes Santo en el Centro Histórico de la capital poblana, esto con el objetivo de que se desarrolle un evento católico de manera en paz y tranquila.
En conferencia de prensa de este lunes, el mandatario estatal explicó que por dos años consecutivos la Procesión del Viernes Santo se suspendió por la pandemia de la Covid-19 y este año se reanudará este evento católico, al que asisten más de 150 mil empresas, por lo que trabajarán en coordinación con la Arquidiócesis de Puebla y los grupos que organizan el evento más importante de la Semana Santa.
“Sé que es un evento muy grande el que se desarrolla, no me ha tocado verlo como gobernador, en 2019 ya había pasado la semana santa, en 2020 y 2021 hubo pandemia y se suspendieron las celebraciones de la Semana Santa y la precesión, este año se reanudará la procesión y desde luego garantizaremos la seguridad y condiciones de higiene y prevención para que se desarrolle en evento en las mejores condiciones”, puntualizó.
Agregó que el Gobierno del Estado colaborará con el Ayuntamiento de Puebla para que este evento religioso al que acuden 150 mil fieles católicos pueda desarrollarse de manera tranquila y con los protocolos de sana distancia para evitar contagios del SARS-CoV-2.
Ayer la Arquidiócesis de Puebla, informó que la Procesión del Viernes Santo encabezada por el Arzobispo Mons. Víctor Sánchez Espinosa, está prevista y se realizará con orden y las medidas necesarias; a menos que la situación cambie y el número de contagios se eleve, se tomaría la penosa necesidad de suspenderla.
Este año nuevamente los fieles católicos podrán acompañar a las imágenes más veneradas en Puebla, entre ellas la Virgen de la Soledad, Virgen de los Dolores, Jesús Nazareno, Jesús de las Tres Caídas y el Señor de las Maravillas.
Foto: Mary Castillo