La presidenta municipal de Puebla Claudia Rivera Vivanco y la secretaria de Seguridad Ciudadana (SCC) María de Lourdes Rosales Martínez, estarían detrás del paro de labores de la Policía Estatal Preventiva que exigen un aumento salarial al gobernador Miguel Barbosa Huerta, de acuerdo a versiones de la administración estatal.
Lo anterior luego de que en el transcurso del día, se detectó que el ayuntamiento de Puebla patrocinó los alimentos a los elementos de la Policía Estatal Preventiva, pues en el transcurso del día una patrulla de la Secretaría de Seguridad del municipio de Puebla ingresó a la dependencia para darles de comer a los inconformes.
A través de un comunicado de prensa aseguró que el gobierno del estado siempre se mostró dispuesto a atender las peticiones presentadas por un grupo de policías inconformes, sin embargo, fueron ellos quienes se negaron a entablar un diálogo formal e institucional.
En el boletín refiere que es inadmisible la intromisión del ayuntamiento de Puebla que encabeza la presidenta municipal, Claudia Rivera Vivanco, quien, a través de la titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, Lourdes Rosales Martínez, auspició y patrocinó la protesta que impulsaron algunos de los agentes. Prueba de ello es su presencia la tarde de este martes en la dirección de la Policía Estatal Preventiva, hasta donde llegaron patrullas municipales a ofrecerles alimentos a los protestantes.
Se tiene identificada también la participación de funcionarios y exfuncionarios entre los que se encuentran: José Tlachi Meneses, coordinador general de Seguridad Pública en el municipio de Puebla, lo mismo que Manuel Alonso, Jesús Morales y Miguel Jiménez Castillo, que actúan a través de quienes se manifestaron ayer.
La participación de estas personas y su influencia en el grupo de inconformes, impide conseguir un acuerdo que sea favorable para los propios policías estatales en su conjunto.
El gobierno del estado reconoce como justa la demanda de mejores condiciones laborales para nuestros policías, pues durante más de 10 años no han tenido un incremento en sus ingresos económicos por el abandono de las administraciones pasadas.
Ofrecer mejores condiciones laborales a los policías del estado será una realidad a la brevedad en la medida en que las finanzas estatales lo permitan, pero resulta injustificable la intromisión de personas ajenas al funcionamiento de la corporación que se inmiscuyen con intereses mezquinos, ante el desmantelamiento de estructuras que funcionaban al servicio y en complicidad con la delincuencia.
El Gobierno del Estado de Puebla reitera su disposición al diálogo para encontrar acuerdos por las vías institucionales. Cabe destacar que en ningún momento, las actividades de vigilancia de la Secretaría de Seguridad Pública, se vieron afectadas por esta manifestación.
