Por Fernando Castillo
El gobernador Miguel Barbosa Huerta, informó que la Consejería Jurídica ya presentó denuncias en contra de varios ex funcionarios morenovallistas que incurrieron en presuntos actos de corrupción en diferentes secretarías, además aseguró que más de tres personajes son investigados y podrían ser sancionados penalmente antes de que arranque el proceso electoral de 2021.
El jefe del ejecutivo estatal expresó que a él no le corresponde revelar la existencia, ni el estatus de las denuncias, no obstante, dijo que ya hay una cadena de investigación por parte de la Secretaría de la Función Pública (SFP) contra varios ex funcionarios estatales, expedientes, dijo que serán entregados muy pronto a la Fiscalía General del Estado (FGE).
“Ya hay denuncias no me toca a mí revelar la existencia, ni el estatus de ellas, porque tienen reserva, pero ya hay, pronto habrá una cadena de investigación, haremos de conocimiento de la autoridad investigadora penal una indagación, ósea dejaron un enredo. Hemos avanzado mucho de todo lo que implica conocer la verdad y no vamos a parar”, sentenció.
En entrevista para un medio local indicó que Puebla merece “saber la verdad” de los presuntos casos de corrupción y desvío de recursos en los que incurrieron en las pasadas administraciones, principalmente en las secretarías de Salud y Educación Pública, por ello es que pronto habrá noticias al respecto.
Barbosa Huerta, dijo que todos los días se encuentra con casos por presuntos actos de corrupción de los pasados gobiernos, porque la administración pública funcionó como un modelo para hacer negocios y obtener beneficios económicos por parte de las anteriores administraciones, por este motivo, es que los panistas querían que él no llegará al poder para sacar a la luz la verdad.
Subrayó que todo aquel personaje que se mete a la política debe saber de antemano cuál es su pasado y no que sirva para defenderse y constituir “impunidad” como lo intentaron hacer en pasadas administraciones.
El mandatario estatal de Morena, rechazó que la investigación por actos de corrupción en las pasadas administraciones sea una “cacería de brujas”, sino más bien es un acto de transparencia, rendición de cuentas y que los actos de corrupción no queden impunes.