Proceso
MEXICO, D.F. (apro).- El Instituto Federal Electoral (IFE) aprobó dar vista a la Unidad de Fiscalización por el presunto uso de cuentas de BBVA Bancomer como mecanismo de dispersión de recursos de la campaña del PRI en 2012.
Al mismo tiempo, los consejeros electorales resolvieron declarar infundada la acusación de que el PRI usó tarjetas Monex para la compra y coacción del voto en la pasada campaña presidencial.
En la indagatoria, a cargo del secretario ejecutivo del IFE, Edmundo Jacobo Molina, se detectó que tres personas que participaron en la estructura electoral del PRI declararon haber recibido tarjetas de Bancomer, dos de los cuales proporcionaron números de cuenta.
Asimismo, reconocieron que a través de ese mecanismo recibieron al menos 2 mil pesos “para el desempeño de funciones partidistas relacionadas con el proceso electoral”.
Lo anterior motivó la petición de los consejeros Benito Nacif y Alfredo Figueroa, con el respaldo de PAN y PRD, para que se diera vista a la Unidad de Fiscalización del IFE –lo que fue aprobado por seis de ocho consejeros– para el inicio de “las investigaciones necesarias a fin de determinar lo que en derecho corresponda”.