La ex Spice Girl, mujer de una ex estrella del futbol y ahora diseñadora de moda. A punto de cumplir mañana los 40 años, la vida de Victoria Beckham no podía ser más glamourosa. Su matrimonio con el futbolista David Beckham, con quien tiene cuatro hijos, parece marchar sobre ruedas, y la casa del sur de Londres en la que viven no es para quejarse, pero a pesar de todo, a Victoria casi nunca se le ve sonreír en público.
La sonrisa perdida se ha convertido en una marca de la Spice Girl Posh y también el motivo por el que se le considera la más misteriosa y quizás la menos querida de las integrantes del ya desaparecido grupo de pop.
Además la distancia existente entre Victoria y sus excompañeras quedó clara en la ceremonia de clausura en Londres de los Juegos Olímpicos de 2012.
Cuatro Spice Girls lo celebraron felices, pero Victoria se limitó a estar ahí. Y en la premier del musical del grupo Viva Forever cuatro de las integrantes llegaron en grupo, mientras que Victoria se presentó con su familia.
Victoria ha dado varias explicaciones sobre los motivos por los que no sonríe ante los fotógrafos. En alguna ocasión lo ha achacado a ellos y en otra al sector de la moda, que le ha robado una parte de sí misma, según ella.
“Me siento bastante mal, porque siempre parezco una estúpida malhumorada”, afirmó en una ocasión. Y hace poco, al subir a internet una foto en la que aparecía con una sonrisa, su marido David escribió: “¡Ven, también puede reír!”.
Con información de DPA y Excélsior.