Ante la llegada de Uber el próximo lunes 8 de junio implicará una nueva era para el transporte a la Angelópolis, ya que será personalizado y con la posibilidad de elegir costos y rutas, valores agregados que abren la competencia directa para los más de 16 mil taxis que circulan por la ciudad.
Esta nueva tecnología obligará a los concesionarios a crear nuevas propuestas para conservar su mercado y beneficiará a los usuarios del servicio del transporte.
Uber es una empresa internacional que proporciona a sus clientes una red de transporte por medio de una aplicación móvil que conecta a los pasajeros con los conductores de vehículos registrados en su servicio. Se lleva una comisión del pago del viaje y sólo acepta pagos con tarjeta de crédito.
El director de la carrera de Ingeniero en Tecnologías Computacionales (ITC) del Tecnológico de Monterrey en Puebla, Mario Lezama Zavariz, consideró que el servicio de la empresa con sede en San Francisco, California, sigue la línea de un modelo de negocio centrado en el cliente; que a diferencia del taxi tradicional, busca facilitar la movilidad y “tener contento al usuario” a través de una aplicación móvil.
En opinión del catedrático del ITESM, Uber es la oportunidad de romper con un monopolio, representado hoy por las asociaciones de taxis.
“Se está pensando en la comodidad del usuario, ya que le permite decidir su ruta a través de aplicaciones como google maps, e incluso compartir el costo si es que otro usuario también se dirige al mismo destino, situación que permite una reducción de costos hasta en un 70 por ciento, a comparación de un taxi tradicional”, manifestó Lezama Zavariz
Al respecto Abel Flores, alumno de Ingeniero Civil del Tec de Monterrey en Guadalajara y quien estudia en Puebla durante este verano, comentó que desde que inició el servicio en su ciudad lo ha empleado, sobre todo en la noche, cuando sale con sus amigos.
“Puedes salir sin ningún problema, sin preocuparte del estacionamiento, o lo que te pueda costar el valet, y la diferencia en costos es muy grande; por ejemplo cuando voy con mis amigos a un restaurant el trayecto de regreso a mi casa en un taxi tradicional puede ser de 150 pesos, mientras con Uber es de 80 pesos”, dijo.
En este contexto, Alejandro Pérez Villaseñor, director de carrera de Ingeniero Civil (IC) en el Campus Puebla, destacó que el servicio de Uber es un apoyo para mejorar la movilidad, en función de que desestimula el uso del automóvil e incentiva una nueva cultura de compartirlo.
Así mismo, resaltó la seguridad como un factor que no ofrecen otros medios de transporte, pues desde el momento de solicitar el servicio, se envían los datos del conductor y a través del celular es posible detectar la ruta que sigue. De igual forma, el hecho de que el pago sea solamente a través de tarjeta de crédito, es otro indicador de que el usuario irá más seguro.
De esta forma, ambos académicos coincidieron que a pesar de las resistencias al servicio de Uber, la competencia que este servicio representa es una oportunidad para que en Puebla se genere más innovación en los servicios de transporte.
“Es momento de que taxistas e incluso líneas de autobuses se pongan las pilas, y así puedan competir por un mercado, a la vez de generar ganancias que llegarán por sí solas, porque los servicios superan las expectativas de los consumidores”, concluyó Lezama Zavariz.