Gabo hizo despegar a América Latina: Poniatowska

La autora de la Noche de Tlatelolco, Elena Poniatowska lamentó la muerte del escritor colombiano Gabriel García Márquez en una reunión con la prensa española previa a la ceremonia en que recibirá el Premio Cervantes, que le entregará el rey de España, Juan Carlos de Borbón, el miércoles, dio a conocer Milenio Digital. 

Durante la reunión, que se realizó en la Biblioteca Nacional en Madrid, la escritora mexicana habló durante 30 minutos y lamentó la reciente muerte de Gabriel García Márquez.

“Lo que ha hecho Gabriel García Márquez para América Latina es único porque echó a volar e hizo despegar a América Latina”, expresó Poniatowsca.

La escritora que en aquella noche del 2 de Octubre en la matanza de los estudiantes en Tlatelolco salvó su vida, dijo  que “igual que Remedios la Bella (personaje de la obra Cien años de Soledad) se va volando por la ventana, eso es lo que hizo Gabo para América Latina: darle las alas que antes no tenía”.

Poniatowska destacó que García Márquez fue un escritor amado y aseguró que “es un autor que cuando el lector cierra el libro, sabe que le ama para siempre y eso se ve en las calles de México, se ve en todas las partes”.

Gabriel García Márquez es en sí mismo el monumento a las Bellas Artes de México”, afirmó la mexicana que adelantó que su discurso al recibir el Premio Cervantes se centrará en América Latina.

Señaló que sigue impresionada por haber ganado el Cervantes, considerado como el Nobel de la literatura en castellano, y destacó la importancia que Miguel de Cervantes ha tenido en la literatura mundial.

La escritora estuvo acompañada por la mayoría de su familia, incluidos ocho de sus diez nietos, la periodista y escritora aseguró que México es un país peligroso para ejercer la profesión.

Además, anticipó que el legado que depositará esta tarde en el Instituto Cervantes será la primera edición de lujo de La Noche de Tlatelolco, un manuscrito original de uno de sus textos, y una pulsera de latón que lleva escrito el nombre de su padre, y que éste utilizó para ser identificado en la época de la guerra.

El legado, como marca la tradición, se deposita en una cámara acorazada, donde permanecerá guardado durante los próximos diez años.

Elena Poniatowska, de 81 años, tendrá una agenda apretada los próximos días. Mañana los Reyes de España le ofrecerán una comida, el miércoles le será entregado el Cervantes y los días posteriores tendrá diversos encuentros con sus lectores.

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