TURQUÍA, 3 de septiembre.- En las últimas horas la foto de Aylan Kurdi ha dado la vuelta al mundo, en ella aparece su cuerpo sin vida recostado boca abajo en la arena de una playa europea.
Sin embargo, y a pesar de la trágica forma en la que murió el pequeño de sólo tres años, su vida siempre fue “feliz”.
La tía del pequeño Aylan otorgó a la agencia estadunidense AP cuatro fotografías que muestran la corta, pero agradable, vida del niño que, junto con su familia, intentaba cruzar el Mar Mediterráneo huyendo de la guerra civil en Siria.
Los familiares describieron al niño como un chico sonriente.
Fuente: Excélsior