El líder local del Frente Popular Revolucionario (FPR), Gustavo Salgado Delgado, asesinado este martes en el municipio de Villa de Ayala, fue sepultado en medio de voces de solidaridad con su familia y de repudio al crimen cometido por presuntos criminales vinculados al tráfico de tierras.
Familiares de Salgado Delgado, su esposa Rosa Salas, así como amigos y miembros de organizaciones sociales, se congregaron en una funeraria de la colonia Lomas de la Selva, cerca de las cinco de la tarde, y posteriormente se dirigieron al panteón “La Paz”, ubicado en el sur de la capital del estado de Morelos.
Durante las exequias, donde se le pidió a los medios de comunicación mantenerse un tanto retirados de los acontecimientos, líderes de organizaciones sociales pidieron justicia para el líder del FPR, quien fuera asesinado y decapitado por sujetos que se separaron de su organización y ahora le disputaban terrenos en una zona de reserva ecológica, donde se pretende asentar a varias familias del estado de Guerrero, según la versión de la Fiscalía Estatal.
Alrededor de las seis de la tarde, el cuerpo de Gustavo fue sepultado y este viernes la organización que encabeza en Morelos llamó a una movilización en la ciudad de Cuernavaca a las cinco de la tarde, que culminará en el zócalo de la ciudad, con el fin de exigir justicia para el hombre de 32 años, quien fuera privado de su libertad la tarde del lunes en la ciudad de Cuautla, y sus restos encontrados en el poblado de Moyotepec, Villa de Ayala, en el campo conocido como Las Huilotas.
Fuente: Milenio