Por Jaime López
Este fin de semana, la comunidad cinéfila de Puebla podrá disfrutar una nueva aventura de la dupla Astérix-Obélix, aquellos personajes animados creados hace seis décadas con el propósito de transmitir parte de la historia francesa, sobre todo el episodio relacionado con la invasión de los romanos a las Galias (región ubicada en la Europa occidental).
Sin embargo, ahora el protagonismo de la historia recaerá en uno de los caracteres secundarios, viejo conocido y amigo de los simpáticos guerreros: el druida (una especie de mago) Panorámix, quien luego de sufrir un accidente decide buscar a su sucesor, aquel que sea capaz de recrear su fórmula mágica, que ayuda al pueblo francés a repeler los constantes ataques de los romanos. De aquí su título en español: “El secreto de la poción mágica”.
Básicamente, el largometraje en cuestión, dirigido por Louis Clichy (colaborador de Pixar en producciones como “Wall-E”) y Alexandre Astier (célebre creador europeo), es recomendable para los menores de edad, pues goza de una premisa sencilla, así como de “gags” que privilegian la comedia física o “de pastelazo”. Asimismo, “Astérix: El secreto de la poción mágica” deja al aire la posibilidad de darle impulso a una aguerrida niña aldeana, aunque lo hace de manera discreta.
En ese sentido, la animación de 85 minutos de duración pudo haber tenido un mensaje más epidérmico entre la audiencia adulta si ponderaba los roles femeninos, sobre todo en una era donde el fenómeno intitulado #MeToo está muy vigente.
No obstante, dicha propuesta fílmica hace pasar un buen rato a los denominados “reyes del hogar”, además de ser dueña de una eficiente técnica de animación, que no deja a la deriva a los protagonistas encumbrados en el viejo continente.