El gobierno de Puebla se deslindó de haber agredido a la reportera de la Jornada de Oriente Yadira Llaven al asistir a tomar fotos en las obras del Gasoducto Morelos en Santa Isabel Cholula. La periodista relató que un sujeto que se identificó como Óscar Burgos y dijo ser funcionario de la Secretaría General de Gobierno, quien acusó al medio de comunicación de informar con “un afán amarillista”.
La periodista de la Jornada de Oriente quien cubre los municipios conurbados de la capital poblana, narró que a través de una llamada vía telefónica, el individuo quien aseguró trabajar en el gobierno Morenovallista se comunicó con ella y reconoció que los trabajadores de la obra tomaron fotos de su vehículo, las cuales él ya tenía en su poder.
No obstante, en tono de reprimenda, el hombre descartó que los empleados hubieran agredido a la informadora, pero cuando ésta le replicó que el supuesto encargado de la obra la encaró a menos de 15 centímetros de distancia y que junto con otros dos laboristas intentaron quitarle su teléfono celular, expresó con insistencia: “¡Tú dime, si te agredió lo corro”.
Ante las amenazas hacia la reportera, el medio de comunicación protestó ante el gobierno del estado y Fernando Alberto Crisanto, funcionario de la administración Morenovallista, dijo que investigaría sobre el asunto.
Minutos más tarde el encargado de Comunicación Social del gobierno de Rafael Moreno Valle afirmó que el tal “Burgos” no aparece en la nómina del Poder Ejecutivo y por tanto no labora ahí. Agregó que también se ignora quienes fueron los empleados que agredieron a la reportera y comprometió todo el apoyo del gobierno en la eventualidad de que ella trámite una denuncia de hechos ante la Procuraduría General de Justicia.